Para muchos de nosotros, coger el coche es una actividad placentera y llena de emociones, pero para otros el hecho de pasar gran parte de su vida en la carretera puede convertirse en un peligro constante. En nuestro concesionario MC Madrid Iveco somos conscientes de que los conductores profesionales están expuestos diariamente a muchos riesgos que pueden estar relacionados o no con su conducta en la carretera.
Por ello, es tan importante que ese colectivo cuente con buenas condiciones de trabajo como cumplimiento de horarios de conducción y descanso, la implementación de elementos de seguridad y de control y una buena herramienta de trabajo (camión, furgoneta, etc.), son fundamentales para mitigar los riesgos a los que están expuestos.
La posibilidad de sufrir un accidente es uno de los peligros más destacados en la jornada de aquellos que se dedican a la conducción de forma profesional. Aunque los profesionales del volante se preocupen mucho por la seguridad vial y que se cumplan normativas de prevención, lo cierto es que el hecho de pasar tanto tiempo en la carretera les hace más propensos a involucrarse en una siniestralidad.
El sedentarismo es otro de los inconvenientes de la profesión. Con largas jornadas al volante, siempre en la misma postura, los conductores están «condenados» a una privación de actividad física. Si tenemos en cuenta que casi nunca se cumple la recomendación de realizar actividades físicas alrededor de 5 veces a la semana, el riesgo de sufrir problemas de salud relacionados con el aumento de la tensión arterial o patologías cardíacas se incrementan de forma considerable.
Constantemente, los profesionales de las carreteras también están expuestos a lesiones derivadas de las funciones que llevan a cabo diariamente como desplazamiento de cargas o problemas de espalda por la postura adoptada frente al volante. En el concesionario MC Madrid Iveco sabemos que contar con un buen asiento y respetar las normativas de seguridad en el trabajo son fundamentales para minimizar esos riesgos. En lo relacionado a las lesiones, siempre están presentes las posibilidades de golpes o fracturas derivados de un accidente de tráfico.
En algunas ocasiones, los conductores también están expuestos a robos y agresiones ya que la delincuencia organizada en torno al robo de mercancías puede suponer un grave problema para los que están en el gremio. En ese sentido, es fundamental contar con medidas preventivas como alarmas, sistemas de comunicación, etc., y tener en cuenta medidas de seguridad al aparcar, planificar la ruta, etc.
Por supuesto, todas las actividades tienen ventajas e inconvenientes y los conductores – como otros profesionales – deben disponer de todas las herramientas para mejorar su protección y calidad de vida.