Los vehículos industriales de una compañía no solo son un medio de transporte y pilar fundamental del entramado y la logística empresarial. También constituyen toda una inversión a la que hay que sacarle partido. No hablemos de los conductores profesionales, cuyos camiones son su herramienta de trabajo y la fuente del sustento familiar. Con esta presentación, sobra decir que cuanto más dure el vehículo en perfectas condiciones, mayores serán los beneficios para todas las partes.
Aunque parezca una utopía, este objetivo puede conseguirse sin mucho esfuerzo. Entre las recomendaciones de los fabricantes y la experiencia del taller Iveco en Madrid, recopilamos los mejores consejos para prolongar la vida útil de los vehículos industriales o de empresa. Si quieres retrasar la necesidad de una nueva inversión en la flota de tu compañía, toma buena nota de nuestro decálogo.
Cinco consejos para aumentar la vida útil de los vehículos de empresa
- Sistema de frenos, neumáticos y suspensión. Ya hemos analizado la importancia vital que tienen elementos como los neumáticos para conducir de manera eficiente y segura. Si los frenos, los amortiguadores o las cubiertas fallan, la conducción está seriamente comprometida. Si lo prefieres, deja en manos de profesionales su revisión y mantenimiento.
- Cambios de aceite y filtros. Sin aceite o con un líquido en mal estado, todo el engranaje del vehículo empieza a fallar. Tenlo en cuenta si quieres que la vida útil de tu camión o furgoneta sea amplia.
- Motor. Sin motor, no hay automóvil. Lógico ¿verdad? Pues, para prolongar su vida útil, es básico mantener controlada la mecánica. Evita el encendido excesivo del motor, controla las puestas en marcha, cuídalo después de muchos viajes largos…
- Control de cargas. Tan importante es distribuir los bultos de manera correcta y equilibrada, como tener en cuenta los límites de peso para cada vehículo. Si no se tienen en cuenta estas variables, los ejes, la suspensión y el conjunto del camión sufrirán las consecuencias y su vida útil se verá drásticamente reducida.
- Revisiones periódicas. Ocupa la última posición del listado a modo de recuerdo porque, en realidad, es la base de todo el decálogo. Lo ideal es encontrar un taller de confianza, en el que te aseguren soluciones y revisiones con todas las garantías. Debes acudir a sus profesionales no solo cuando surjan averías (que también) sino de manera periódica, para controlar que todo esté correcto. En el taller Iveco en Madrid, contamos con un equipo que garantiza un servicio de postventa de calidad. Ven a conocernos.