? Drástica reducción de emisiones para camiones en solo seis años

Emisiones de CO2 en el sector transporte

La Unión Europea aumenta el objetivo de reducción de emisiones de gases de efecto invernadero para el sector transporte. ¿Cómo ha sido recibida la medida?

Un 15% antes de 2025 y un 30% en 2030. Este es el objetivo de reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero aprobado definitivamente por Comisión Europea para los vehículos industriales. Con el año 2019 como punto de referencia, los organismos comunitarios piden a los fabricantes que se adapten a las nuevas exigencias de la normativa contra la contaminación con CO2 y la mayor parte de los países miembros aplauden la medida (en la votación previa hubo 23 votos a favor – incluido el de España- y 4 en contra -entre ellos el de Alemania).

Los fabricantes y demás representantes del sector transportes consideran que estos objetivos de reducción son inalcanzables y piden a la UE que reajuste los niveles a las circunstancias actuales. Analizamos el principal punto de conflicto.

? Objetivo 2030: propósitos de reducción de CO2 demasiado exigentes

Esta nueva normativa sobre la reducción de gases de efecto invernadero es la primera relacionada con los vehículos industriales. No en vano, camiones y autobuses son los responsables del 6% del total de las emisiones contaminantes y de más del 25% dentro del sector transporte. Después de su aprobación definitiva (y con el apoyo final de los 28 países miembros), el reglamento prevé multas para todos los fabricantes que no cumplan con los objetivos de merma en los próximos años.

Para los ciudadanos y los gobiernos comunitarios, es una buena noticia en la lucha contra la contaminación y a favor del cuidado del medio ambiente. Pero los representantes del sector transportes la ven con recelo. Consideran el objetivo demasiado exigente y complicado de conseguir puesto que, en solo seis años, tendrán que adaptarse a una normativa que no depende solamente de sus esfuerzos.

Fabricantes y profesionales recuerdan, entre otras, la necesidad de ampliar las infraestructuras disponibles para la recarga de vehículos eléctricos o de gas natural licuado. Si estos van a ser los sistemas alternativos que aseguren la viabilidad del sector, dicen, además de la inversión por parte de las empresas de logística en este tipo de transportes, se necesita el apoyo de los servicios públicos.

Pero no es el único recoveco que queda por pulir. En este plan de reducción de las emisiones para vehículos industriales también se reclama mayor inversión en I+D+I (para desarrollar baterías alternativas) y ayudas para el transporte ‘cero emisiones’. Los fabricantes y responsables del sector recuerdan que las posibilidades de descarbonización de camiones o autobuses son notablemente más caras que las de los turismos. ¿Habrá posibilidad de enmienda antes de que comiencen las sanciones?