¿Qué es el movimiento Van Life?

El término camper van life, o simplemente van life, se ha puesto de moda. Se trata de un término anglosajón que significa literalmente “vida de furgoneta”, y que está muy relacionado con quienes escogen viajar o incluso vivir en una furgoneta camper o una autocaravana: un estilo de vida que cada vez atrae a más personas que quieren viajar y recorrer mundo sin ataduras, sin depender de hoteles y combinaciones de vuelos, y cuya demanda se ha disparado a raíz de la pandemia de coronavirus.

Como todo, optar por viajar siguiendo esta filosofía “van life” en camper tiene sus pros, y sus contras; pero es innegable que esta forma diferente de vivir y de viajar atrae a muchas personas que están interesadas en adentrarse en el apasionante mundo de las furgonetas camperizadas para descubrir una forma totalmente nueva de moverse por el mundo. ¿Estás preparado/a para conocer todos los secretos de la vida camper?

¿Cuál es el origen del van life?

Hoy día es fácil encontrarse con personas que practican este estilo de vida con tan solo buscar el hashtag #VanLife en redes sociales como Twitter o, sobre todo, Instagram; sin embargo, lo cierto es que no hace muchos años que este término se hizo popular en las redes. Fue en 2011 cuando Foster Huntington, un joven que trabajaba como diseñador en Nueva York, decidió abandonar su trabajo y su vida anterior y recorrer toda América haciendo lo que más le gustaba: practicar surf y sacar fotos increíbles para contar sus vivencias.

Huntington optó por publicar sus fotos en lo que entonces era aún una red social minoritaria: Instagram; y además, se dio cuenta de que lo que estaba haciendo era mucho más que una forma alternativa de viajar: era toda una filosofía de vida. Por eso, decidió etiquetar sus fotos con el hashtag #VanLife.

Sin saberlo, él fue el primero en acuñar un término que hoy día sigue más vivo que nunca, con millones de fotografías etiquetadas y de personas que se identifican con ese estilo de vida. Si hace veinte años la mayoría de los jóvenes soñaban con tener un coche y un piso propio, cada vez más jóvenes -y muchos mayores- se plantean comprarse una furgoneta camper para viajar y recorrer mundo en ella: un espíritu de libertad que recuerda mucho al movimiento hippie de los 60… pero en el siglo XXI.

¿Cómo vivir y viajar en furgoneta?

Adentrarse en este mundo no es complicado, pero sí requiere tiempo y, sobre todo, una reflexión sobre el paso que vamos a dar. Hay que tener en cuenta que vamos a necesitar comprar una furgoneta camper o si no, camperizar una: y tanto si la compramos nueva como de segunda mano, eso requiere una inversión importante de unos cuantos miles de euros. Además, camperizar una furgoneta no es barato, incluso aunque lo hagamos nosotros mismos.

Lo mejor es consultar a algún experto o informarse muy bien sobre qué tipos de furgonetas son las mejores para camperizar, qué características debemos buscar (o cuáles nos convienen en nuestro caso), qué elementos queremos instalar (¿Queremos baño en la furgoneta…? ¿Instalamos cocina…? ¿Ponemos placas solares…?). Una alternativa, antes de dar el paso a la camperización y la “Van Life”, es alquilar antes una furgo camper o una autocaravana.

La siguiente pregunta es: ¿a dónde voy? Una camper es perfecta para viajar a donde quieras, así que esto es ya cuestión de gustos. Algunas personas prefieren visitar cuantas más ciudades y países mejor; no obstante la propia filosofía de este estilo de vida tiende más a identificarse con viajes a rincones naturales y/o apartados.

En España, Asturias, el Pirineo aragonés, la Costa Brava o la Andalucía rural son “destinos camper” populares para recorrer con furgoneta; fuera de España, lugares como el Algarve (Portugal), la costa mediterránea francesa e Italia, los Alpes suizos, el norte de Francia y el sur de Alemania, o Marruecos, son destinos frecuentados por los camper. Es cuestión de escoger: ¡el mundo es tuyo!

Por último no hay que olvidarse de lo más importante: cuestiones como dónde dormir, dónde conseguir agua y comida, dónde ducharse, cómo ir al baño (si no tenemos uno), cómo cocinar… son dudas cruciales que surgen a cualquier camperista novato/a. Una opción para parar e instalarse pueden ser los campings, muchos practicantes del van life los usan, aunque recurrir a ellos rompe un poco la filosofía camper. En cualquier caso, huye de zonas muy turísticas, grandes urbes o áreas de descanso.

Ventajas y desventajas del camper van life

Practicar el camping van life, vivir en una furgoneta, puede parecer toda una aventura a muchos, y lo cierto es que lo es. Pero como todo, tienes sus ventajas y desventajas; veamos algunas de ellas:

Ventajas:

  • Eres libre: eres libre totalmente para ir a donde quieras, o para quedarte donde te sientas a gusto. No dependes de una reserva en un hotel que no es lo prometido, de un avión que has perdido, o de un destino aburrido o con mal tiempo.
  • Tu casa siempre contigo: cuántas veces estando de viaje habremos pensado “con lo a gusto que estaría yo en mi casa”. Pues no hay problema: gracias al van life, tendrás la certeza de que tu furgoneta, a la que ahora ves como tu hogar, siempre estará cerca.
  • Viajas low cost: aunque esto es tema de debate, es cierto que -descontando el precio de la camper- viajando de esta forma puedes ahorrar bastante dinero tanto en alojamiento como en comida, aunque todo dependerá de cómo nos organicemos.
  • El mundo es tuyo: suena muy grandilocuente, pero es cierto. ¿Quieres dormir en una playa de ensueño? Adelante. ¿Quieres levantarte viendo unas preciosas montañas, o escuchando los sonidos del bosque? ¡Vamos! Tú eliges el cómo, el dónde y el cuándo.

 Desventajas:

  • La gasolina cuesta: puede que nos las prometamos muy felices con nuestra casa con ruedas; pero una furgoneta con todos sus accesorios camper pesa bastante, y puede consumir más de 10 l./100 km. Y una autocaravana, ni te imaginas. Echa cuentas.
  • Espacio escaso: cuando vemos en redes sociales esas fotos idílicas de personas o de parejas en su camper, nos olvidamos de que tienen que vivir -o convivir- todo el día en un espacio de menos de 10 metros cuadrados. No apto para claustrofóbicos.
  • Todo es improvisado: esto puede ser algo positivo, o negativo; aquí lo vemos por el lado negativo: claro que puedes viajar a donde quieras y dormir donde te plazca… Pero también hay días en que todo se tuerce y acabas “tirado” donde puedes…
  • Los inicios son caros: aunque podemos encontrar “chollos” por 10.000 euros, para conseguir una camper mínimamente decente y bien equipada con la que viajar cómodos, tendremos que pagar 2 y hasta 3 veces eso; más averías, más repuestos…

¿Hay mucho postureo en el van life?

El estilo de vida van life tiene cada vez más seguidores, sí; pero tener una furgoneta camperizada y compartir tus fotos en Instagram no significa que seas un camperista. Muchas personas se preocupan por la apariencia y el postureo, y el mundo camper no es ajeno. No es difícil encontrar perfiles de personas más preocupadas por posar en un selfie mostrando lo idílico que es viajar en furgo y estar frente a una playa, que por mostrar la vida camper real.

Y es que ya lo hemos dicho. La camper van life tiene muchas ventajas y grandes momentos, pero no todo es de color de rosa ni tan bonito como algunos pretenden mostrar; hay momentos de incertidumbre, de planificación, días en que la furgoneta te deja tirado o en que no sabes dónde ducharte, dónde comprar comida, o dónde guarecerte de una lluvia torrencial, por ejemplo. Aun así, con todo eso, te aseguramos que este mundillo merece mucho la pena.